Cuidate Plus.com /Joana Guillen Varela , Dermatóloga
Las manchas en la piel de Jude Bellingham han dado mucho de qué hablar. Te contamos qué son, por qué aparecen y cómo se pueden prevenir y tratar. Actualizado
El melasma es un problema de pigmentación de la piel y es un trastorno muy común entre la población, sobre todo en mujeres en edad fértil, particularmente entre los 25 y 45 años, pero también pueden aparecer en los hombres en un 10%. De hecho, “este problema se caracteriza por las manchas de color café que aparecen en el labio superior, mejillas y frente”. Es un trastorno de la pigmentación cutánea “indicativo de zonas fotoexpuestas, ya que la exposición al sol es uno de los factores de riesgo descritos para su aparición”, informa a CuídatePlus, Miguel Sánchez Viera, dermatólogo y director del Instituto de Dermatología Integral.
Este tipo de manchas o hiperpigmentación suelen aparecer en áreas expuestas al sol, lo que hace que las manchas se vean más. ¿Por qué aparecen? Su origen es desconocido, informa el experto, “por eso solo podemos hablar de los factores implicados en su desarrollo como son la exposición al sol, algunos fármacos, ciertas alteraciones hormonales y predisposición genética”.
¿Se puede prevenir?
Para prevenirlo, informa el especialista, “debemos no exponernos a la radiación solar, pero como eso es una misión casi imposible, lo mejor es utilizar a diario (durante todo el año) una crema con factor de protección elevado, yo recomendaría un SPF 50 aplicado media hora antes de salir de casa y reaplicado cada dos horas (excepto si nos metemos en el agua, que lo aplicaremos nada más salir)”. Por supuesto, añade, “tampoco nos expondremos a cabinas de autobronceado”. En el caso de que el melasma esté causado por fármacos, “hay que dejar de tomarlos, siempre y cuando sea posible y no sin antes acudir a nuestro médico a explicarle el problema”.
Tratamiento
Si ya tenemos la mancha, al ser un problema estético “hay que cuidar durante todo el año para poder conseguir un color homogéneo de la piel”.
Dependiendo de la pigmentación y de la extensión de las manchas, se pueden emplear, como primer paso, “cremas con hidroquinona y con ingredientes despigmentantes, que mejoran su apariencia”.
El siguiente paso, describe, “sería realizar una microdermoabrasión, una exfoliación de la piel que nos permite aplicar activos que actúan en las capas más profundas de la piel”. Como novedad y “con unos resultados muy efectivos, uno de esos activos que se emplean son el ácido tranexámico en alta concentración”. Posteriormente, “hay que emplear cremas de uso doméstico con este compuesto (en una concentración más baja) de forma regular según indicación médica”.
Duración del tratamiento
Para conseguir mejores resultados, este tratamiento se debe repetir cada tres o cuatro semanas.
Cuando hay que alcanzar niveles más profundos, se emplea el láser, con el fin de “eliminar de modo selectivo las acumulaciones de pigmento”.
También se pueden emplear láseres fraccionados, de Erbio, “que producen microzonas de calentamiento en las capas profundas de la piel, eliminando células cargadas de pigmento, generando colágeno y renovando a la vez su superficie en pequeños puntos”.
Estos tratamientos “consiguen controlar el melasma y reducir o eliminar temporalmente el acúmulo anómalo de pigmento, pero ningún tratamiento hasta ahora ha conseguido eliminar de una vez y para siempre el problema”. Por este motivo, “quien lo sufre deberá realizar tratamientos periódicamente y mantener los cuidados de forma habitual”.